El valor de las certificaciones

Columna «Enfoque Laboral», semanario económico «Efectivo» de Prensa Libre.

Publicado 4 de septiembre de 2018.

 
 

Las empresas deben cumplir con requerimientos para poder obtener una certificación que les permita ingresar en determinados mercados

 

En el mundo moderno de los negocios, las empresas para poder realizar las actividades propias de su giro comercial necesitan cumplir con determinados requerimientos. Sin embargo, no basta con el cumplimiento de las garantías mínimas que establecen las leyes laborales, sino que deben cumplir con estándares internacionales y obtener una certificación que avale el producto o servicio. 

La importancia de la certificación radica en que acredita que la empresa cumple con una serie de disposiciones en cuanto a los procesos de fabricación y producción de sus productos, logística, salud y seguridad ocupacional, higiene, cumplimiento de las leyes laborales y disposiciones medio ambientales.  

Existen agencias internacionales dedicadas a certificar prácticas y cada una de las cuales tiene su propio sistema para obtener la certificación, dentro de las cuales se encuentran: International Organization for Standardization (ISO)  es la encargada de establecer normas que avalan la mayoría de productos en todo el mundo cuenta con cuatro grupos de normas: a) normas de gestión de calidad, b) normas de gestión de riesgo y seguridad, c) normas de gestión de medio ambiente, y d) normas de gestión de responsabilidad social; Normas OHSAS las cuales establecen requisitos mínimos para la seguridad y salud en el trabajo, EU ecolabel la cual es reconocida en Europa para promover la excelencia medioambiental, la Fairtrade International que implica una alternativa al comercio convencional y se basa en la cooperación entre productores y consumidores, International Food Standard (IFS) la cual comprende normas de auditoría internacionalmente aceptadas, Japanese Agricultural Standards (JAS) que regula los requisitos que deben cumplir si desean  vender productos orgánicos en el mercado japonés, Kosher que certifica a los alimentos que pueden ser consumidos por personas de distintas religiones como musulmanes y budistas, Naturland que promueve la agricultura orgánica en todo el mundo, la UTZ kapeh que significa «buen café» en maya, que pretende lograr una producción responsable del café, Veriflora, como una certificación para la industria de la floricultura y horticultura,  entre otras certificaciones. 

Las certificaciones no son obligatorias, son de carácter voluntario, pero sí un requisito para ingresar a ciertos mercados, lo que permite a las empresas generar confianza a nivel local e internacional con proveedores, compradores y clientes.

Augusto Valenzuela

Columna «Enfoque Laboral», semanario económico «Efectivo» de Prensa Libre.

Publicado 4 de septiembre de 2018.

 
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